lunes, 13 de noviembre de 2023

EMPRESAS - ALSA, LA MULTINACIONAL ESPAÑOLA DE LA MOVILIDAD: INNOVACIÓN, DIVERSIFICACIÓN Y EXPANSIÓN INTERNACIONAL


ALSA: cómo crecer y convertir una compañía de autobuses en una multinacional de la movilidad integral 



Las empresas que no permanecen estáticas ante los cambios del mercado, son aquellas que lograrán crecer y sobrevivir en el medio y largo plazo.

Fuente: Entrevista al CEO de ALSA en "Empresa Global" (año 2013).

Aquellas que sean capaces de adaptar su "modelo de negocio" a las nuevas circunstancias y retos del entorno, son las que se mostrarán más competitivas.



Las que no paran de innovar y ampliar su negocio, diversificando sus vías de ingresos. 



Y mucho más en sectores tan complejos y competidos como es el caso del transporte de pasajeros, teniendo que afrontar grandes retos y amenazas, como es el caso:

(1) del incremento del coste del combustible

(2) la creciente competencia (por ejemplo, teniendo que hacer frente al negocio de las compañías aéreas y ferroviarias "low-cost" o las aplicaciones tipo "Bla Bla Car"

(3) las nuevas -y cada vez más habituales- limitaciones a la contaminación impuestas a nivel legislativo.



Este entorno cambiante provoca que sólo las compañías más dinámicas y flexibles sean capaces de crecer y consolidar sus negocios. 


Y este es el caso de ALSA, una empresa española que ha superado los 100 años de vida, creciendo sin parar a base de:

(1) adquirir compañías competidoras, 
(2) formar interesantes consorcios de colaboración y asociaciones estratégicas
(3) a esa capacidad de adaptación a los cambios y anticipación a los retos. 


Así, la exitosa estrategia de expansión realizada por ALSA, muestra algunas facetas muy interesantes:
  • La apuesta por el "crecimiento inorgánico" (mediante la compra de otras empresas de autobuses) como vía de crecimiento en España.
  • La capacidad de asociación con los grandes operadores de la movilidad. 
  • La innovación, la creatividad y el uso de la tecnología.
  • Y la transformación de su "modelo de negocio", diversificando la actividad, tanto a nivel de "portafolio de servicios", como a nivel geográfico.

ALSA es, sin duda, una dinámica compañía que ha pasado de gestionar toda clase de rutas en autobús, a convertirse en los últimos años en una empresa internacional de movilidad integral, que compite con los grandes operadores del sector a nivel mundial. 





Crecimiento, diversificación e innovación

Con cerca de 6.000 vehículos y 3.500 destinos, no solo se trata de la flota de autobuses más grande España (y una de las mayores del mundo) sino que hablamos de una gran multinacional del transporte. 

Por carretera, por ferrocarril, por vía marítima e incluso a bordo de bicicletas o ambulancias, ALSA presta sus servicios hasta en 16 mercados mundiales, y cuenta con presencia directa a través de empresas filiales ubicadas en 12 países de 4 continentes.

Fuente: Memoria ALSA. 

Esta compañía, cuyo origen se encuentra en las montañas asturianas, ha experimentado una gran expansión, pasando de facturar 100 millones de euros en el año 1990, a superar la barrera de los 1.000 millones treinta años después (en año 2022).



Un crecimiento que, como se ha reseñado, ha sido logrado principalmente (1) a base de la adquisición de decenas de compañías de autobuses competidoras (haciéndose con sus contratos de explotación de rutas y flotas de vehículos) y su integración en el grupo.


Así, con esta estrategia de "crecimiento inorgánico", el Grupo ALSA ha pasado de contar con una flota de 500 autobuses y 700 trabajadores en los años 90, a los cerca de 6.000 vehículos y 16.000 empleados con los que cuenta en la actualidad.


En este sentido, destacan las compras de la empresa pública Grupo ENATCAR en 1999 (que le permitiría incrementar notablemente su presencia en la mayoría de regiones españoles) o del Grupo Continental Auto en 2007 (que por entonces era su competidor directo y el segundo operador nacional de transporte de viajeros por carretera de España).


Pero también (2) mediante la firma de acuerdos de colaboración y asociaciones con todo tipo de empresas de transporte (de autocares, ferroviarias, navieras y de movilidad en bicicleta); 

así como (3) su gran apuesta por el mercado internacional.

ALSA es una compañía centenaria que en los últimos tiempos viene experimentando una enorme transformación, con el objetivo de defender su posición de liderazgo y, sobre todo, de crecer y ser más competitiva, adaptándose a las nuevas necesidades de un entorno y un mercado (como es el transporte de pasajeros) lleno de retos y competencia, y donde la aplicación de las nuevas tecnologías y la conectividad juegan un papel fundamental.

Es, en definitiva, la historia de una gran compañía de autobuses que viene innovando como ninguna, transformando su modelo de negocio para convertirse en una multinacional de la "movilidad integral".

Así, a partir de la primera década de los años 2000, ALSA ofrece a sus clientes una solución global para sus necesidades de transporte más allá del autobús, interconectando incluso diferentes medios.


  • Desde su extensa flota de autobuses "ALSA" (que explotan infinidad de rutas regionales, nacionales e internacionales) o los autobuses de clase y confort superior "ALSA Supra" para los viajes más largos;
  • pasando por la gestión de líneas del metro urbano y periurbano, por ejemplo, en Madrid;
  • la explotación de los autobuses municipales en ciudades españolas como Bilbao, Santander, Palencia, Cartagena, Ibiza o Granada, o en países como Marruecos, Chipre o China;
  • la explotación de autobuses 100% eléctricos en ayuntamientos como Granada;
  • la puesta en marcha del primer bus autónomo sin conductor de España para prestar sus servicios en el campus de la Universidad Complutense de Madrid;
  • la gestión del transporte ferroviario, trenes turísticos y funiculares en varias poblaciones españolas; 
  • las ambulancias en Madrid y Castilla-La Mancha, 
  • la gestión del servicio municipal de bicicletas en ayuntamientos como León;
  • hasta el desarrollo de nuevos servicios, aplicaciones, consorcios y alianzas para explotar el mercado de la movilidad en todas su manifestaciones.

Desde 2019, ALSA se viene presentando como una gran marca (de las más valiosas y conocidas de España) que ofrece toda clase de soluciones de movilidad para viajeros.


Y la mayor parte de su apuesta se centra en el sector público, mediante el acceso y la explotación de concesiones públicas de servicios de movilidad (en ayuntamientos, regiones y países de medio mundo). 


De hecho, la actual "visión" de la compañía va por ese camino: ser el líder mundial en el transporte público.


De ahí su apuesta por el crecimiento internacional y la obtención de concesiones públicas también en otros países.

Dinamismo, creatividad, crecimiento internacional, diversificación, innovación, apuesta por la tecnología y búsqueda de la excelencia, son algunas de las claves de la expansión y éxito de esta interesante empresa.

En algunos aspectos, el perfil de ALSA guarda cierto paralelismo con el caso de Air Europapues ambas compañías comenzaron con la actividad de transporte en autobús, y las dos crecieron internacionalmente cubriendo la demanda de movilidad de la emigración española, hasta que decidieron diversificar sus negocios (si bien, ALSA decidiría apostar por el desarrollo del negocio del transporte en autobús, mientras que Air Europa se lanzaría a explotar la movilidad aérea).



Fuente: Extra Jaén.


Las cifras de ALSA

a- La magnitud de la empresa 

ALSA es hoy un gigante multinacional del sector de la movilidad, líder en España en el transporte de pasajeros por carretera, con una cuota de mercado superior al 15%, porcentaje que supera el 30% si hablamos específicamente del segmento de concesiones públicas de rutas regulares de transporte (según datos del año 2022):

  • Con una flota de 5.931 vehículos (3.500 de ellos en España)
  • y 16.079 trabajadores,
  • la empresa conecta más de 3.500 destinos en 16 países,
  • contando con filiales internacionales en 12 mercados,
  • transportando a 423 millones de pasajeros al año, 
  • y gestiona 41 redes urbanas y metropolitanas en nuestro país,
  • logrando una cifra de negocio superior a los 1.100 millones de euros (según datos del año 2022).




b- Presencia internacional directa en 12 países de 4 continentes

Desde sus inicios, la empresa ha ido creciendo de forma sostenida, tanto en España (especialmente a través de la adquisición de compañías competidoras) como a nivel internacional.

Fuente: Ideal.

Fuente: Granada Hoy.

De hecho, ALSA ha sido una de las empresas españolas pioneras a la hora de internacionalizar su negocio y expandirse por el mundo.

Así, en los años 60, daría su primer salto al mercado europeo (para cubrir la demanda de viajes internacionales de la emigración asturiana) implantándose también -antes que nadie- en exóticos mercados como China (1984), Marruecos (1999), Chile (2001) o más recientemente en Arabia Saudí (2022).

  • EUROPA. ALSA opera desde los años 60 y 70 en 6 países del viejo continente (España, Suiza, Bélgica, Francia, Portugal y Andorra) conectando más de 200 destinos mediante rutas internacionales. También gestiona los servicios municipales de transporte y otras concesiones de movilidad en países europeos, como es el caso de Francia. A mayores, la empresa desarrolla su actividad desde hace años en otros 2 países mediterráneos: Malta y Chipre.
  • ÁFRICA. En África, la compañía se ha posicionado como el mayor operador privado de transporte de pasajeros de Marruecos, donde tiene presencia en 6 ciudades.
  • AMÉRICA. En América Latina, ALSA tiene presencia en Chile mediante una asociación con una compañía local.
  • ASIA. En China, ALSA fue toda una pionera, implantándose allí a principios de los años 80 de forma innovadora y exitosa, en un momento en que las empresas europeas apenas pisaban suelo oriental. De hecho, en la actualidad el mercado chino es el segundo más importante para la empresa (solo por detrás de España) donde obtiene casi un cuarto de su cifra de negocio.
  • Y en 2022, ALSA conseguiría el contrato para la gestión de autobuses interurbanos en Arabia Saudí, logrando así presencia directa en un total de 12 mercados internacionales de Europa, África, Asia y América Latina.


c- La vinculación con la multinacional británica Mobico: asociarse para crecer

ALSA es un gran holding empresarial compuesto por más de 150 sociedades, cuya matriz (ALSA Grupo, S.L.U.) es propiedad -desde 2005- de la multinacional británica  Mobico (la antigua "National Express"), una de los mayores grupos de transporte del mundo.


Aquí también es posible encontrar paralelismo con el caso de Iberia y su fusión con British Airways: parece que la sintonía en el mercado del transporte entre España y Reino Unido siempre ha sido muy buena, estrechando lazos de asociación entre sus empresas para ser más competitivas a nivel mundial.

Sin embargo, el principal accionista de Mobico es a su vez la familia Cosmen, fundadora de ALSA, y que ostenta también la vicepresidencia de esta importante multinacional.

De hecho, los Cosmen han ido incrementando su participación en Mobico hasta ostentar el 20,37% de su capital en enero de 2024, convirtiéndose en su mayor accionista. 

De esta forma, participada por Mobico (cuya vinculación ha sido muy positiva para consolidar su expansión internacional y profesionalización en los últimos años), pero a su vez por la familia Cosmen (que es el principal accionista de Mobico) es cómo se mantiene de alguna forma la españolidad de esta histórica compañía, que opera como la filial española de la multinacional inglesa.

Es más, otro de los principales accionistas de Mobico es también español: la firma Azvalor Asset Management. 

De hecho, ALSA es la filial más importante dentro del grupo Mobico, a la que aporta un cuarto de todos sus ingresos.


Fuente: Memoria ALSA.

Sin embargo, a pesar de estar integrada en la multinacional británica, ALSA opera con cierta autonomía, siendo dirigida y participada directamente por los Cosmen, especialmente en algunos mercados internacionales.


Así, por ejemplo, las filiales de ALSA en países como China, Malta y Chipre, no dependen de Mobico, sino que en estos casos son propiedad directa de la familia Cosmen. 




Un caso de éxito en internacionalización, alianzas y apuesta por la sostenibilidad

-El éxito en su estrategia de internacionalización

Una de las facetas más interesantes del caso ALSA, es su estrategia de internacionalización y decidida apuesta por crecer en el mercado exterior, habiendo logrado presencia directa hasta en 12 mercados de 4 continentes.


Y, sobre todo, habiéndolo hecho con un rotundo éxito, sin haber tenido que abandonar ninguno de los nuevos mercados abiertos.

Una expansión internacional que, en casos como Marruecos, sería propiciada (haciendo de la necesidad una virtud) ante la imposibilidad de seguir creciendo dentro de España ante una sentencia del Tribunal de Defensa de la Competencia. 

Otra muestra del dinamismo y la flexibilidad que viene mostrando la compañía para no dejar nunca de crecer y avanzar a pesar de los obstáculos.

De hecho, con su implantación en países como China o MarruecosALSA es una de las multinacionales españolas (junto a los bancos, las textiles, las constructoras y la industria del automóvil) que rompe la "maldición" de la expansión internacional más allá de Europa. 

Otras compañías españolas como DIA, Telepizza o Panrico-Donuts, también realizaron en su día ambiciosos proyectos de internacionalización en mercados tan lejanos como China. 

Si bien, con el paso del tiempo, se mostrarían incapaces de rentabilizar sus inversiones allí (acumulando grandes pérdidas año tras año) y terminando por vender sus filiales internacionales.

Por el contrario, desde muy pronto, ALSA ha logrado implantarse y crecer con fuerza en otros países, diversificando también su cifra de negocio desde un punto de vista geográfico (evitando depender exclusivamente de la marcha de la economía española). 

  • En Europa, ALSA gestiona tanto rutas internacionales entre países, como  concesiones de transporte público hasta en 8 países
  • De hecho, la compañía ha logrado recientemente contratos de explotación de rutas en Chipre y Malta.
  • A nivel de África, ALSA es líder en Marruecos, gestionando el transporte público de 6 ciudades.
  • En Asia, ALSA tiene una importante presencia en China desde los años 80.
  • Y en LATAM, la compañía tiene presencia en Chile. 

España reporta el grueso de sus ingresos totales (con más del 50% de la cifra de negocio), seguida de China (que genera en torno a un 25%) y Marruecos (con cerca de un 20%).


¿Y cómo ALSA, a diferencia de otras compañías, ha logrado el éxito en su expansión internacional?

Según comentaba el antiguo CEO de la compañía en una entrevista para la revista "Empresa Global", algunas de las claves han sido: 

  • (1) "el control de riesgos" 
  • (2) "la adaptación al entorno local",
  • (3) y la formalización de alianzas con socios locales, especialmente en los mercados más restrictivos al capital foráneo (como Francia o China)

Fuente: Empresa Global.

A mayores, parece ser que la "paciencia" o capacidad de aguante (especialmente durante los primeros años) y la implantación de forma "gradual" y "flexible", sin parar de realizar cambios y mejoras con el fin de adaptarse a los requerimientos y legislaciones de los mercados internacionales, explicarían también el éxito de su salida al exterior. 

Lograr buena sintonía con las administraciones, optando a nuevos contratos, poco a poco y, sobre todo, contando con el apoyo de socios locales.


Así, ALSA llegaría a asociarse en China hasta con 14 empresas locales para explotar sus diversas rutas, presentándose ante el gobierno chino como una empresa "mixta" pero indudablemente vinculada a aquel país.

Lo mismo ocurriría a la hora de entrar en otros países como Francia. 

Nuevamente en el caso de ALSA encontramos paralelismos con la estrategia de implantación internacional de otras compañías líderes como INDITEX mediante la firma de acuerdos de colaboración con socios locales en los mercados con unas barreras de entrada mayores.

Y en otros mercados como el caso de Chile, la manera de entrar sería a través de la compra directa de una empresa chilena de autobuses.


ALSA crearía sociedades filiales en China o Marruecos para prestar sus servicios a la población china o marroquí (contratando personal de esos países, organizando los horarios y las rutas en base a sus necesidades y requerimientos gubernamentales, adaptándose al entorno, etc.). 


Es decir, mimetizándose con sus costumbres, preferencias y forma de hacer las cosas en estos mercados (por ejemplo, a la hora de tramitar licencias o de presentar el servicio ante los ciudadanos) y proponiendo mejorías con respecto a sus tradicionales competidores.


-Las alianzas con otros operadores, claves en la diversificación y crecimiento internacional de ALSA

Además de su integración en el Grupo Mobico (que le daría acceso a nuevos mercados internacionales y la consecución de enormes sinergias a la hora de crecer y expandirse internacionalmente) otra de las constantes de ALSA ha sido la firma de alianzas y la conformación de "consorcios" con administraciones públicas y empresas de todos los ámbitos del transporte.

  • Así, ALSA ha realizado alianzas con la compañía francesa Ouibus o la italiana Marino Bus para la explotación de rutas internacionales entre sus respectivos países y España.
  • Cómo hemos comentado, para su implantación en China, ALSA contaría con la colaboración de hasta 14 socios locales, o para su entrada en Arabia Saudí formaría un consorcio con la compañía española Moventia.
  • En España, las alianzas y colaboraciones con Renfe son, por ejemplo, una constante en la historia de ALSA desde sus primeros años.
  • O las asociaciones con navieras como Suardiaz para explotar, por ejemplo, el transporte marítimo en la Bahía de Cádiz, con la empresa alemana Nextbike para la explotación de bicicletas urbanas, o con Eco Raíl para presentarse a la explotación de las nuevas líneas liberalizadas de ferrocarril en España.




-La inteligente apuesta por la "sostenibilidad" , las nuevas tecnologías (innovación) y la calidad

  • El afán por mejorar el servicio y la experiencia del cliente (calidad) es otro de los pilares de ALSA para mostrarse competitiva. Ofrecer un servicio puntual, a precios competitivos y con el máximo confort, conforma la propuesta de valor de la compañía para captar pasajeros y competir con otros medios.
  • Por otro lado, la inversión en innovación y el uso de nuevas tecnologías es una constante de ALSA en los últimos años: y es que el mercado del transporte ha cambiado, y en la actualidad resulta imprescindible "plantar cara" ya no a competidores directos, sino a aplicaciones como "Bla Bla Car" ("sustitutivos") que suponen una amenaza mucho mayor a la hora de perder clientes en los autobuses. 
  • Es por ello, que la compañía ha lanzado su propio servicio "VTC", así como su aplicación "ALSA Cab".
  • Por último, la decidida apuesta por la "sostenibilidad" (potenciando el uso de vehículos eléctricos, híbridos y/o de cero emisiones) es otro de los factores competitivos y diferenciales de ALSA en los últimos años. 
Fuente: Diario de Almería.
  • Dada la actual legislación en Europa y en buena parte del mundo (cada vez más restrictiva con la contaminación) ALSA viene presentándose como una compañía "verde" y "sostenible", que invierte y apuesta por vehículos cada vez menos contaminantes
  • Un factor de gran relevancia y cada vez más tenido en cuenta por las administraciones públicas a la hora de conceder licencias a las empresas para gestionar el transporte público en sus ciudades. 
  • Así, apostando por la "sostenibilidad", ALSA "gana puntos" a la hora de cumplir con los requisitos más valorados o exigidos por el sector público cuando opta a las concesiones de movilidad, al tiempo que mejora su imagen de empresa "responsable", "sostenible" y comprometida con el medio ambiente.










Historia y evolución de ALSA: desde Asturias para el mundo



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1) El origen de la compañía: el antiguo transporte en diligencias (año 1916)

Los antecedentes de ALSA se encuentran en la unión de seis empresarios de la población asturiana de Luarca que, desde principios del siglo XX, venían desarrollando la actividad de transporte de pasajeros a través de las históricas diligencias.

De esta forma, Francisco García Gamoneda, Vicente Trelles González, Liborio Rodríguez González, Antonio González Vega, Fernando Álvarez Cascos y Manuel Riesgo Gallo deciden asociarse para desarrollar nuevas rutas que uniesen Luarca con las principales ciudades de Asturias.

La empresa nacería para cubrir las necesidades de movilidad de la población asturiana, dada la complicada orografía de la región, entre las montañas y ciudades.


Así, en 1916 fundan una nueva compañía denominada "El Luarca", la cual, en consonancia con la "motorización" de España, iría sustituyendo gradualmente sus diligencias para el transporte de pasajeros por los nuevos vehículos de tracción mecánica (precedente de los autobuses modernos). 


2) La fundación de ALSA: servicio de autobús entre localidades asturianas (1923)

Como evolución de "El Luarca", en el año 1923 se fundaría otra compañía: Automóviles Luarca, S.A. (cuyo conocido acrónimo es ALSA) aportando un capital social de 700.000 pesetas (4.207 euros) repartidas en acciones de 500 pesetas cada una.

La plantilla, formada por conductores, mecánicos y administrativos, estaba compuesta inicialmente por 31 trabajadores, y contaba con una flota total de 7 autobuses.

ALSA comenzaría prestando servicio de transporte por carretera entre poblaciones de Asturias, principalmente cubriendo la ruta entre Luarca y Oviedo. 

En el año 1923, Primo de Rivera publicaría el decreto regulador de las líneas de transporte por carretera en España (en el cual se fijaban tarifas, horarios, conexiones y cualificación del personal) forzando así a la profesionalización del sector.

A finales de los años 20, ALSA se iría presentado a la explotación de nuevas rutas entre localidades asturianas, llegando a gestionar hasta media docena de líneas.


3) El primer crecimiento: la adquisición de cinco compañías competidoras en Asturias (1926-1930)

Como ya hemos comentado, una de las principales vías de crecimiento de ALSA en España sería mediante la compra de otras empresas de autobuses competidoras (como forma de hacerse con sus licencias para la explotación de nuevas rutas e incrementar la flota de la compañía). 

De hecho, a lo largo de su historia, ALSA llegará a integrar decenas de compañías de autobuses.

La primera adquisición se produciría en 1926: como forma de incrementar el número de las líneas explotadas y destinos ofrecidos dentro de la geografía asturiana, ALSA alcanzaría un acuerdo para la compra de tres compañías: 

  • "El Trevías", 
  • "La Villa de Tineo" 
  • y "El Castropol",
ampliando también su flota de autobuses hasta superar la veintena.


Dos años después, pondría en marcha un servicio de transporte de mercancías, al tiempo que se inauguraría la importante ruta entre Oviedo y La Coruña, dando el salto fuera de la región asturiana. 


Esta conexión -de casi un día de duración- sería operada con autobuses de la marca "Saurer" (los más avanzados de la época) los cuales contaban con una lujosa carrocería "Pullman". 

Ofrecer a los pasajeros el máximo confort posible a bordo de sus autobuses sería una de las prioridades de la compañía desde sus inicios: calidad y puntualidad.

En 1930, adquiere otras dos empresas competidoras que operaban también en el ámbito regional: "Cinco Villas" y "Los Hispanos", experimentando un notable crecimiento y alcanzando una flota compuesta por un total de 43 autobuses.

El negocio mostraba una tendencia claramente creciente, llegando a posicionarse a principios de los años 30 como la mayor compañía de autobuses de Asturias.


4) El impacto de la Guerra Civil y la firma del primer "consorcio" de colaboración (1936-años 40)

Sin embargo, los años de la Guerra Civil Española serían especialmente complejos y problemáticos para la empresa: ALSA sufriría grandes pérdidas, unido a importantes deterioros en sus instalaciones y vehículos. 

De hecho, gran parte de sus autobuses quedaría confiscada, y la actividad se vería interrumpida en varias ocasiones.

Una vez finalizado el conflicto bélico, los años de posguerra resultaron también de gran dureza para la compañía, la cual luchaba por recuperar la normalidad. 

En el año 1941, ALSA conectaría a la mayor ciudad de Asturias, Gijón, también dentro de sus rutas (con Oviedo, Ribadesella y Luarca) procediendo a inaugurar su icónica estación de autobuses en dicha ciudad.

Fuente: Todocoleccion.net

A mayores, ese mismo año reforzaría la ruta que conectaba Asturias y Galicia, esta vez también desde Gijón (además de Oviedo) pasando por Ribadeo (Lugo). 

Para ello, conformaría un consorcio con la "Empresa Ribadeo", consolidándose como la ruta más larga e importante que por entonces realizaba ALSA.

Se trataría de la primera asociación realizada por ALSA con otra compañía de movilidad, otra de las constantes de su estrategia de expansión.


5) Recuperación y crecimiento (años 50 y 60)

A partir de los años 50, la estabilidad volvería a la actividad del transporte de pasajeros y ALSA crecería con fuerza: nuevas rutas, nuevos autobuses (de 40 a 76) y una plantilla que pasaría de 100 a 200 empleados entre 1950 y 1960.

De hecho, ALSA continuaría con su estrategia de crecimiento mediante la compra de nuevas empresas competidoras:

En 1955, adquiere la empresa "El Avilés", logrando la explotación de un total de 9 líneas en Asturias y Galicia:

  • Oviedo-Ribadeo
  • Oviedo-Cangas del Narcea
  • Oviedo-Villaviciosa
  • Oviedo-Avilés
  • Oviedo-Gijón (en consorcio con Renfe)
  • Gijón-Ribadesella
  • Gijón-Luarca
  • Trevías-Luarca
  • Oviedo-La Coruña (en consorcio con la empresa de Ribadeo)
En esta etapa, ALSA promovería la realización de nuevas asociaciones y "consorcios" con otras compañías (tanto competidoras, como en el caso de la empresa nacional de ferrocarriles, Renfe) para prestar un servicio integral al pasajero en tren + bus. 

La mayoría de los autobuses empleados eran de la marca británica Aclo (AEC), compañía para la cual ALSA acabaría actuando también como concesionario oficial en España.


Transporte de pasajeros, transporte de mercancías y concesionario de vehículos: la diversificación en la actividad de ALSA comenzaba a hacerse patente.

De hecho, a partir de la segunda mitad de la década de los 50, el número de líneas operadas se incrementaría exponencialmente, hecho que además propiciaría el traslado de la sede de la compañía de Luarca a Gijón.



6) La fusión con "Empresa Cosmen" y las primeras rutas internacionales (años 60)

El gran crecimiento de ALSA se produce en el año 1960, cuando la compañía asturiana anuncia la fusión por absorción de "Empresa Cosmen".

Cosmen era otra empresa de autobuses de ámbito regional que había experimentado un gran crecimiento en los últimos años: sus comienzos se remontan a la explotación de la línea entre Cangas del Narcea (Asturias) y Villablino (León), si bien tras la adquisición de "Autos ASÚA", la compañía había incrementado sus rutas y frecuencias entre Asturias y León.

Con la fusión de ALSA con Empresa Cosmen, el hijo del fundador de esta última (José Cosmen) se pondría al frente de la nueva gran ALSA

De hecho, la familia Cosmen se convertiría en el accionista de referencia de la nueva sociedad resultante de la fusión

Con gran dinamismo y ambición, la entrada de los Cosmen en ALSA supondría un fuerte espaldarazo a la expansión de la compañía. 

De hecho, la flota de ALSA superaría el centenar de autobuses a principios de los años 60, principalmente de la histórica marca española Pegaso.

Tras Asturias y Galicia, ALSA continuaría ampliando sus rutas por la mitad norte de España, y en 1964 inaugura la importante ruta entre Oviedo y Madrid

De esta forma, la empresa comienza a recorrer las carreteras del centro y noroeste de España, conectando Galicia, Asturias y Castilla y León con Madrid. 

A mediados de los años 60, se produce también el "boom" de la emigración asturiana hacia destinos europeos (Francia, Bélgica y Suiza). 

Por este motivo, ALSA decide ofrecer sus primeras rutas internacionales encargadas de cubrir la demanda de movilidad entre Asturias y Europa Central.

De esta forma es cómo ALSA se lanzaría también a explotar el negocio de viajes internacionales a nivel europeo, marcando un nuevo hito en la historia y diversificación geográfica de la compañía.


7) La expansión nacional e internacional y la modernización de la flota (años 70 y 80)

A partir de los años 70 y, sobre todo, durante los años 80, ALSA decide acelerar su ritmo de crecimiento, tanto a nivel nacional como internacional.

La compañía accede a la explotación de nuevas rutas en la zona norte y centro de España, al tiempo que crearía nuevas conexiones con Europa. 

En nuestro país, nuevamente el crecimiento de ALSA se basaría en la compra de competidores durante los años 70 y 80.

La compañía se convertía así en una de las mayores empresas de autobuses de España, pasando de operar 200 a más de 500 autobuses a finales de los 80. 

ALSA lograría además el respaldo de los bancos para ejecutar su ambicioso plan de expansión, que incluía la renovación total de su flota e instalaciones.

De esta forma, la empresa asturiana invierte en la modernización de todos sus autobuses, pasando a utilizar mayoritariamente la lujosa marca alemana Mercedes-Benz.

La compañía asturiana procedería también a la renovación de sus talleres, así como de sus instalaciones administrativas.

Por otro lado, durante los años 80, la familia Cosmen incrementaría su participación en ALSA, hasta hacerse con la propiedad y el control total de la empresa. 


8) Expansión internacional (China y Marruecos) y diversificación: la creación de un gran "holding" multinacional (años 80 y 90)


-La entrada en China (1984)

La ambición y el dinamismo que la familia Cosmen consiguió impregnar en ALSA se viene reflejando en varios hitos de su historia.

Uno de ellos fue, sin duda, la introducción de la compañía en China. 

Así, en el año 1984, en un momento en que la mayoría de compañías europeas aún eran reacias a dar el salto a este enorme mercado potencial, ALSA se lanzaría a la conquista del consumidor chino.

A través de varios estudios de mercado (y una buena visión empresarial), la empresa española había detectado la gran demanda de movilidad -acompañada de un mínimo confort- existente entre la población china, acostumbrada a viajar de pie y "como sardinas en lata" en los saturados trenes y vehículos públicos de aquel país.

Sin embargo, para la introducción de los servicios de movilidad en el mercado chino (y la obtención de la licencia), ALSA comenzaría operando de una original y creativa manera: como una empresa de taxis, dado que las líneas de autobuses estaban en manos del Gobierno Chino y no se permitía la entrada de iniciativa extranjera.

Así, durante los primeros años (1984 y 1990), ALSA explotaría el servicio de taxi en varias ciudades.

No obstante, a principios de los 90 y gracias a un cambio legislativo, la compañía comenzaría a prestar con normalidad el servicio de transporte de pasajeros en autocares, siendo así la primera empresa extranjera autorizada para realizar esta actividad en el país. 

ALSA se presentó ante la población china como un operador privado de autobuses que ofrecía a los usuarios la posibilidad de realizar sus desplazamientos entre ciudades y provincias (1) sentados, (2) sin saturaciones ni aglomeraciones y (3) respetando la puntualidad de los horarios. 

De hecho, ALSA presentaría varias novedades y mejorías para la población china en relación al servicio ofrecido:

  • Estableciendo horarios fijos de salida, pues hasta entonces los autobuses en China partían una vez se habían cubierto todas las plazas.
  • Implantando la venta de billetes de ida y vuelta (inexistentes en medios de transporte terrestre hasta ese momento).
  • Desarrollando un sistema informático bilingüe en español y chino. 

Un servicio y confort que fue muy bien recibido por el público de China y que pronto se expandería por nuevas poblaciones y provincias, llegando con el tiempo a participar en 167 líneas (explotadas conjuntamente con 14 empresas locales) y contando contar con más de 5.100 vehículos y 8.000 empleados.

De hecho, el desembarco pionero en China jugó a favor de ALSA, que se convertiría en el líder del sector en aquel país.  

A diferencia de otras multinacionales españolas, cuyos intentos de implantación en el mercado Chino resultaron finalmente abortados, ALSA lograría rentabilizar su presencia en aquel país.  

De hecho, China se convertiría en el segundo mayor mercado por ingresos para ALSA, donde la compañía obtiene casi un cuarto de sus ingresos totales (en torno a 300 millones de euros).

Fuente: Expansión.


-La diversificación dentro de la actividad de autobuses

Con el empuje del mercado chino y el crecimiento en España y Europa, la cifra de negocio ascendería hasta superar la barrera de los 100 millones de euros en el año 1990.

Gracias a su estrategia de crecimiento y diversificaciónALSA terminaría cubriendo todos los segmentos del transporte por carretera, llegando a explotar cuatro tipos de servicios/rutas:

1) Autobuses urbanos y metropolitanos, mediante la explotación de concesiones públicas de transporte municipal en ciudades de toda España (Gijón, León, Bilbao, Santander, Granada, Oviedo, Avilés, Palencia, etc.) así como en poblaciones de otros países como Malta y Marruecos. 

2) Autobuses regionales, explotando decenas de concesiones de servicios interurbanos en casi toda España, participando también en consorcios regionales con las diversas administraciones públicas.

3) Autobuses nacionales, mediante la explotación de rutas regulares que unen las principales ciudades de España (líneas a nivel nacional).

4) Autobuses internacionales, operando una amplia red de 65 autorizaciones internacionales que unen España con la mayor parte de la Unión Europea y el norte de África. 

De hecho, la compañía iría estableciendo filiales internacionales en los distintos países en los que venía prestando sus servicios, dando formal al Grupo ALSA.

En el año 1995, la flota de ALSA superaría los 1.000 autobuses, y la cifra de negocio los 150 millones.


-La diversificación hacia nuevas actividades

A principios de los años 90, ALSA continuaría con su imparable expansión en el sector de la movilidad a bordo de autobuses, pero también potenciaría la diversificación de su negocio mediante el desarrollo de nuevas actividades complementarias al transporte de pasajeros:

  • Transporte de mercancías.
  • Alquiler de vehículos.
  • Agencia de viajes.
  • Negocios de hostelería.
Nuevas empresas que cubrirían la demanda de sus pasajeros y clientes en otros ámbitos del transporte.


Para el desarrollo de estas nuevas actividades, ALSA crearía nuevas sociedades filiales que convivirían dentro del grupo con las diversas empresas que venían operando su negocio de movilidad en bus en el extranjero. 

Es de esta manera cómo se iría conformando el gran holding empresarial que es el Grupo ALSA en la actualidad, y que llegará a estar compuesto por más de 150 sociedades.

A mayores, dentro de su proceso de expansión y diversificación, ALSA comenzaría a presentarse mayoritariamente a las concesiones públicas de los servicios municipales, comarcales y provinciales de autobuses, tanto en España como en otros países europeos.

De hecho, para facilitar el acceso a las concesiones de varios mercados extranjeros, ALSA decidiría asociarse con grandes grupos internacionales (como fue el caso de la alianza con el gigante francés Keolis, y que daría lugar al nacimiento de la filial ALSA Keolis, controlada al 60% por la compañía española; mediante esta "joint venture", ALSA conseguiría acceder al restrictivo mercado del transporte urbano e interurbano en Francia).


-La entrada en Marruecos (1999)

En el año 1999, ALSA lograría su primera concesión en Marruecos.


Tras China, Marruecos se trató de otra de las más importantes y arriesgadas apuestas de la compañía española por crecer internacionalmente.

Sin embargo, se trató de una decisión de alguna forma "forzosa", pues la compañía se vio obligada a crecer en el mercado exterior ante la imposibilidad legal de seguir haciéndolo en España durante años (debido a una sentencia restrictiva del Tribunal de Defensa de la Competencia a raíz de la compra de ENATCAR, y que explicamos a continuación).

Su implantación en aquel país fue otro éxito gracias a su evolución gradual, así como a la capacidad de adaptación a las necesidades locales: "ofrecer un servicio prestado por marroquíes y para marroquíes, cubriendo la demanda de movilidad del público de aquel país".

El mercado de Marruecos con el tiempo experimentaría un notable crecimiento, y ALSA acabaría ofreciendo sus servicios hasta en 6 ciudades de aquel país: Marrakech, Agadir, Tánger, Casablanca, Rabat y Jouribga, contando con 1.700 autobuses y dando empleo a cerca de 6.000 trabajadores.


-La consolidación de la presencia internacional (finales de los 90´s)

De esta forma, desde su implantación en el mercado europeo en los años 60 y 70, ALSA había sido capaz de expandir también su negocio por Asia (años 80) y África (años 90). 

Así, la presencia internacional de la multinacional española quedaría de la siguiente forma:

  • En Europa, operando en España, Portugal, Andorra, Francia, Bélgica, Suiza y Alemania.
  • En Asia, a través de su importante filial de China.
  • En África, mediante su implantación en Marruecos.  

Un total de 9 países que, años después, ascenderían a 11. 


-El crecimiento del canal online

ALSA sería también una de las pioneras a la hora de apostar por la venta online de billetes a principios de los años 2000.


9) Segundo gran crecimiento: la compra de nuevas compañías como ENATCAR (1999) y Continental (2007)

A lo largo de los años 2000, continuaría el crecimiento de la compañía basado en la absorción de competidores. 

Así, dentro de EspañaALSA compraría compañías como:

  • Turytrans
  • Rutas del Cantábrico, S.L.
  • Empresa Fernández
  • Empresa Arrojo, S.L. (Asturias)
  • Alsina Graels

A mayores, destacan las adquisiciones del Grupo ENATCAR en el año 1999 y del Grupo Continental Auto en 2007.


-La compra de ENATCAR (1999):

ENATCAR (cuyo nombre originario era ATCAR) era una empresa pública de autobuses que había sido creada por RENFE. 

Se trataba de la sociedad filial que la compañía ferroviaria empleaba para complementar los desplazamientos en tren y, a finales de los 90, facturaba cerca de 60 millones de euros, contando con una flota de 200 autobuses.

En 1999, ALSA alcanza un acuerdo con la SEPI (Sociedad Estatal de Participaciones Industriales) para su compra, por un importe de 26.200 millones de pesetas (157 millones de euros). 


Mediante esta nueva fusión por absorción de ENATCAR por parte de ALSA, nacería el Grupo ALSA-ENATCAR, que años después se rebautizaría como Grupo ALSA a secas.

Sin embargo, la adquisición de esta empresa le valdría a ALSA una condena del Tribunal de Defensa de la Competencia, sentencia que le impediría seguir creciendo en España durante años. 

Ante esta situación, Cosmen "haría de la necesidad una virtud", apostando por la internacionalización de ALSA, dando el salto a Marruecos (en 1999) y Chile (en 2001).

Para su implementación en Chile, ALSA adquiriría la empresa de autobuses Buses Lit, la cual gestionaba líneas regulares entre varias ciudades de aquel país.


Se producía así la primera incursión de ALSA en el mercado latinoamericano, si bien la compañía española operaría en Chile solamente entre 2001 y 2005, pues terminaría abandonando sus operaciones en dicho país. 


Sin embargo, ALSA volvería a Chile en el año 2017, esta vez mediante la asociación con el grupo local Tur Bus.



-La compra de Continental Auto (2007):

Tras la fusión de ALSA con National Express en 2005, la compra del Grupo Continental Auto dos años después supondría otra de las grandes operaciones que darían un gran empujón al crecimiento de la compañía. 

Continental Auto era la segunda mayor compañía de autobuses de España tras ALSA: contaba con una flota de 860 vehículos y era el principal competidor de la empresa asturiana.

Fuente: caminonesclasicos.com

Continental estaba en manos de la constructora ACS, con la cual se alcanzaría un acuerdo de compra por un importe de 701,6 millones de euros. 

Con estas adquisiciones, ALSA afianzaría su liderazgo en el sector del transporte de viajeros por carretera en España, 

  • acaparando un 15% de cuota de mercado, 
  • contando con 2.100 autobuses en nuestro país,
  • y transportando a 142 millones de pasajeros al año.

 

10) La compra de ALSA por parte de National Express-grupo Mobico (2005)

En octubre de 2005, y tras dos años de negociaciones, la multinacional británica de transporte, National Express (actual Grupo Mobico), anunciaría la adquisición de ALSA a la familia Cosmen:

  • mediante una operación de fusión por absorción, 
  • por un importe de 670 millones de euros
  • asumiendo la deuda de la empresa (por valor de 289 millones
  • y pagando en efectivo otros 217 millones adicionales.

Como contrapartida de la operación, los Cosmen se harían con el 9,9% del accionariado de National Express-Grupo Mobico, participación que tiempo después se acabaría incrementando hasta el 14,41% del capital. 

En 2009 la participación de la familica Cosmen se incrementaría hasta el 18,97%.

Y en 2024, ésta superaría el 20% del capital de Mobico, convirtiéndose en el principal accionista de la multinacional británica. 

Así, la familia Cosmen es titular del mayor paquete accionarial de Mobico, logrando también la vicepresencia de la empresa, cargo que ostentaría Jorge Cosmen Menéndez-Castañedo, quien a su vez venía ejerciendo la presidencia de ALSA. 

También en 2024 otro actor español, la gestora de activos Azvalor Asset Management, se introduciría en el capital del Grupo Mobico como accionista de referencia, al hacerse con otro 4% del capital. 


10) La transformación de ALSA en un operador integral de movilidad (años 2010´s-2020´s)

-Nueva oleada de adquisiciones en España

Durante las dos primeras décadas de los años 2000, ALSA continuaría su expansión por España mediante la adquisición de nuevas compañías:

  • En 2008, compra Transportes Colectivos (concesionaria del transporte interurbano en la provincia de Vizcaya).
  • En 2012, Automóviles Casado (con sede en Antequera, Málaga).
  • En 2016, Autocares Herranz (Madrid).
  • En 2017, Transportes Santo Domingo y Maitours (Madrid).


De esta forma, a través de la estrategia de "crecimiento inorgánico", la compañía incrementaría aún más su actividad y posición de liderazgo en nuestro país, logrando nuevas concesiones para la explotación de rutas urbanas, regionales y nacionales. 


La compañía lograría un flota superior a los 3.000 autobuses en España, y más de 5.000 contando los 11 países en los que tenía presencia. 



-La transformación en un "operador integral y multimodal de movilidad"

Por otro lado, en consonancia con la diversificación de su actividad, ALSA anunciaría su objetivo estratégico de convertirse en un operador integral de movilidad que cubra todos los segmentos y modalidades de transporte.

Es decir, ofrecer nuevos servicios de transporte a los usuarios (nuevas líneas de negocio) más allá de las clásicas rutas en autobús.


De esta forma, presentando servicios de movilidad sostenible, multimodal y conectada se ponía en marcha la nueva apuesta estratégica y comercial de la compañía, con el objetivo de diversificar sus servicios y canales.


ALSA comenzaría así a explotar nuevos servicios de movilidad como:

(1) El transporte ferroviario (a través de líneas de metro urbano y periurbano, funiculares y trenes). 

Esta línea de negocio sería explotada a través de la sociedad filial ALSA Rail. 


(2) El transporte fluvial (mediante acuerdos con navieras como Suardiaz).


(3) "Microtransporte" (principalmente mediante la gestión del servicio de bicicletas municipales en ayuntamientos como el de León).


(4) Servicios VTC "última milla" (a través de "ALSA Cab", que ofrece la venta combinada de billetes de autobús junto con desplazamientos en vehículos privados).


(5) Y transporte sanitario (a través de la adquisición de Vitalia, empresa de ambulancias titular de 140 UVI móviles en Madrid y Castilla-La Mancha y que contaba con una plantilla de 260 trabajadores).



-La nueva imagen corporativa de ALSA (2019)

Fruto de este nuevo rumbo y visión, en el año 2019 la compañía presentaría su nueva imagen corporativa.



Fuente: redes sociales ALSA.


-La apuesta por la innovación, el uso de la tecnología y la sostenibilidad

Otro de los rasgos característicos de ALSA, especialmente a raíz de la diversificación de su actividad para ser un operador global de movilidad, es su apuesta por la innovación y el uso de la tecnología como herramientas para ser competitiva y adaptarse al nuevo entorno.


De esta forma, por ejemplo, en el año 2021 ALSA anunciaba la puesta en marcha del primer autobús autónomo que funciona en España.


Se trata de un modelo que opera en el campus de la Universidad Autónoma de Madrid, sobre un circuito abierto al tráfico real, marcando un hito en la historia del transporte de nuestro país. 


Tecnología que apoya también su apuesta estratégica por la sostenibilidad, mediante el uso de nuevos modelos de autobuses eléctricos y contaminantes al 0%, principalmente destinados a la explotación de líneas municipales.


Y es que, adelantarse a las nuevas y crecientes restricciones legales que vienen a nivel europeo y mundial para los vehículos más contaminantes, resulta ciertamente inteligente para evitar problemas con las administraciones públicas y, sobre todo, ganar puntos a la hora de presentarse a las licitaciones, al tiempo que se mejora la imagen de la compañía a nivel de la ecología. 


Pero no solo a nivel de sostenibilidad, sino que ALSA trabaja por alcanzar la excelencia en otros ámbitos de la gestión de la empresa, como es el caso de la dirección de personal, pues la compañía ha obtenido, por ejemplo, el certificado "Top Employer" en 2023.

Y es que, el nuevo modelo de negocio de ALSA, ante la complicación del transporte privado por carretera en los últimos años (incremento del coste de la gasolina, mayor competencia con trenes y aviones "low-cost", irrupción de aplicaciones de movilidad como Blablacar, bajada del número de usuarios de autobús, etc.) viene apostando principalmente por la gestión de concesiones públicas de los servicios de autobús, tal y como indica su visión: "ser el principal operador de movilidad pública a nivel mundial".


Por tanto, todos los factores que faciliten la relación con las administraciones públicas (sostenibilidad, buen trato a los empleados, avances tecnológicos, excelencia, etc.) son incorporados a la oferta de la compañía.


La única gran "pega" de centrar el grueso del negocio teniendo a los ayuntamientos como principales clientes, lamentablemente es la "morosidad" (retrasos en los pagos), si bien, cambios normativos en los últimos años han mejorado esta situación.


La innovación y la tecnología han sido fundamentales también para el lanzamiento de la aplicación "Mobi4u" y la solución "Maas" ("Mobility as a Service") desarrolladas por la empresa.



12) ALSA en la actualidad: crecimiento, internacionalización y apuesta por el ferrocarril



-La era "post" de la "crisis covid"

En el año 2020, el tráfico de viajeros de ALSA experimentaría un descenso del 44% como consecuencia de las medidas de restricción de movilidad y confinamiento tomadas a raíz del "coronavirus", provocando que la empresa declarase unas pérdidas de -105 millones de euros.


Sin embargo, la compañía volvería a "números verdes" y a la senda del crecimiento un año después, dando por superada la "crisis covid" al completo en 2022 (cuando ha recuperado los niveles "pre-pandemia").



-Continúa el crecimiento internacional: Chipre, Arabia Saudí y Malta

En la segunda década de los años 2000, ALSA continuaría con su crecimiento y expansión internacional:
  • En 2020, lograría cuatro concesiones en Chipre.
  • En 2022, firmaría un contrato de 500 millones de euros durante los próximos 10 años con Arabia Saudí para la explotación de 27 líneas de larga distancia.
  • Y en 2023, la compañía conseguiría la gestión del transporte público en Malta, gestionando una flota de 360 autobuses y 300 conductores.

-La apuesta por el sector ferroviario 

Siguiendo la estrategia de diversificación de las líneas de negocio y servicios de movilidad, ALSA Rail anunciaba en 2023 su alianza con la empresa española Eco Raíl (grupo Magnet) para presentarse a la siguiente fase de liberalización de transporte ferroviario en las líneas de alta velocidad y cercanías en España.


De hecho, ALSA cuenta con licencia de operador ferroviario desde el año 2013, habiendo puesto en marcha un centro propio de formación para sus futuros maquinistas.  


De esta forma, ALSA aspira a ser uno de los operadores ferroviarios de referencia en España, compitiendo con Renfe, Ouigo e Iryo, además de ser el líder indiscutible en el segmento de autobuses concesionales, y una de las compañías más innovadoras, dinámicas y ambiciosas del país.



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